Parece que las primeras joyas que le fueran ofrecidas a la Virgen del Pilar, de las que se tiene constancia escrita, serían las GARLANDAS.

Esto ocurriría al menos desde mediados del siglo XIV.Las garlandas son aquellas diademas normalmente articuladas, a modo de banda, que usaban las doncellas de la corte. Se sabe que en 1358, además de unas entregas de dinero, recibiría dos garlandas de plata y piedras y otra más de perlas.

Es posible que se colocaran junto a algunos collares que en ocasiones pudieron pender de uno de los mantos textiles que ya tenía la Imagen desde el siglo XIII. Quizá la tiara completa, o más bien alguna parte de ella, desmontándola de sus bisagras.

Se colocarían suspendidas como alhajas votivas o también adheridas a unas tablas sobre las que se ponían las donaciones y que también se veneraban.