En el Oribe estamos obsesionados en buscar la belleza, y con esa idea creamos nuestras joyas.
Queremos que las colecciones sean frescas, coloridas y actuales, pero intentando darle el toque personal que toda joya debe tener.
Cada una de ellas encierra mucho. De la idea, pasamos al boceto, y de éste al modelo, que es la materialización de la joya. Cualquier detalle de la vida cotidiana nos sirve de inspiración.
De ahí a la fabricación, que es eminentemente artesanal. Trabajamos de la única manera que sabemos y que nos han enseñado, intentando conservar el espíritu del oficio de los viejos Oribes, conscientes de que la técnica manual imprime a la joya una característica que la hace única, y que le da valor adicional.
Creemos en lo que hacemos y por ello le ponemos tanta pasión. Pero no sólo a nuestro trabajo, sino también a la vida. Pasión que queremos que se vea reflejada en la pieza terminada.
“Nos encanta lo que hacemos, y se nos nota.”

Isabel Núñez
Creadora
Se dedica a la joyería por vocación. Domina los oficios: Sacado de fuego, grabado y engastado a buril. Modelista en cera y diseñadora.
Es sensible, alegre y comunicativa. Está al frente del taller El Oribe desde hace más de 10 años.
Es feliz.
Foto: José M. Pérez Padilla